En los motores de gas CHP de las plantas de biogás, la mezcla pobre y altamente comprimida de biogás y aire de admisión debe encenderse con una chispa potente. Para ello se utilizan bujías de encendido de alta calidad y alto rendimiento.
Sin embargo, debido a las impurezas de los gases de combustión, a lo largo de la vida útil de las unidades de cogeneración se forman depósitos en las bujías que provocan un deterioro de la función de encendido.
Estos depósitos consisten principalmente en compuestos de azufre incrustados, resultado del contenido de H2S en el biogás. Además, durante la combustión, los compuestos de silicio contenidos en trazas en el biogás dan lugar a la formación de incrustaciones especialmente estables de óxido de silicio. Otra fuente de contaminación es la entrada de aceite lubricante en la cámara de combustión a través de la ventilación del cárter, el turbocompresor y la propia pared interior del cilindro. Los residuos de aceite lubricante insuficientemente quemados dan lugar a depósitos de hollín (carbón de aceite) en el compartimento del motor y, en particular, en las bujías.
El resultado de unas bujías sucias es una combustión insuficiente en la unidad de cogeneración, lo que provoca una reducción de la potencia del motor y un aumento de las emisiones contaminantes.
Para evitar una combustión desfavorable y los posibles daños consiguientes, debe vigilarse de cerca el estado de las bujías y se recomienda una limpieza ultrasónica intensiva periódica.
Tras la limpieza por ultrasonidos con un producto de limpieza adecuado, las bujías recuperan su rendimiento.
La principal ventaja de limpiar las bujías en un dispositivo de limpieza por ultrasonidos en comparación con un cepillo de alambre es el mejor resultado de limpieza en los huecos y la evitación de la abrasión mecánica, inevitable con un cepillo de alambre. Especialmente en el caso de las bujías de precamara, que se utilizan en las unidades de cogeneración MWM, por ejemplo, los ultrasonidos permiten la limpieza en las finas aberturas de la bujía, a las que no se podría llegar con un cepillo.
Tras muchos años de pruebas, la vida útil de las bujías de una unidad de cogeneración GE Jenbacher de 500 kW que funciona con biogás ha aumentado de 6.000 horas a 8.000-10.000 horas gracias a la limpieza por ultrasonidos. Teniendo en cuenta que el coste de un juego de bujías es de unos 4.000 euros, la inversión en un limpiador ultrasónico se amortiza en un año. Además, el limpiador ultrasónico puede utilizarse para otras tareas de mantenimiento, por ejemplo, en una planta de biogás.